IX MARCHA: Alianza Indígena-Urbana,
una realidad
AINI - 5 de abril 2012.-
En la ciudad de La Paz se realizó el primer Encuentro Urbano Indígena, con
miras a la Novena Marcha, en la que participaron: la Confederación de Pueblos
Indígenas de Bolivia (CIDOB), el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del
Qullasuyu (CONAMAQ) y Organizaciones Sociales, que afianzaron sus vínculos para
comenzar la caminata, para que el gobierno de Evo Morales respete los derechos
individuales y colectivos de las y los bolivianos establecidos en la
Constitución Política del Estado.
“Me
parece importante la línea de acción que quieren tomar (los sectores urbanos).
No podemos recurrir a la Justicia porque está cooptada, entonces nos queda la
acción directa. En toda la historia, en la colonia, desde antes de la
república, con la acción directa se han defendido los derechos de los pueblos
indígenas, los derechos humanos, colectivos. Ahora nuevamente tenemos la acción
directa para defender nuestros derechos”, dijo Rafael Quispe, ex Mallku de la
Conamaq – Industrias Extractivas, en referencia a la marcha que comenzará el 25
de abril en Chaparina, departamento de Beni.
Durante
este Encuentro Urbano Indígena, algunos dirigentes de organizaciones sociales
habían propuesto elaborar un pliego de demandas conjunto, “hay temas comunes
que deben unir a todas las y los bolivianos: la defensa de los derechos
humanos, de los derechos colectivos, de los recursos naturales, de la
Constitución. Nos deben unir temas comunes, como la Agenda de Octubre (de
2003), la nacionalización de los recursos naturales. Pero para los indígenas la
Novena Marcha debe ser preeminentemente indígena.”, agregó Quispe.
Del
encuentro participaron: Juntas Vecinales, Federaciones de Maestros,
Federaciones de Estudiantes, grupos de defensa del medio ambiente, Casegural y
otras organizaciones urbanas de todo el país. Firmaron un voto resolutivo junto
a la CIDOB y el CONAMAQ. El texto establece la alianza indígena-urbana para
defender el TIPNIS, por el respeto a la autodeterminación de los pueblos
indígenas, entre otros de sus derechos avasallados por el actual Gobierno.
También consensuaron accionar para recuperar los recursos naturales, para
expulsar a las empresas transnacionales, así como para defender los derechos a
un trabajo digno -debidamente remunerado- y para tener salud y educación de
calidad y pública.
Rafael
Quispe, consultado si la marcha pedirá la revocatoria para el presidente,
aclaró: “hacer un revocatorio sería para lavarle el rostro a Evo Morales, sería
para victimizarlo. Además, él tiene el control de la Justicia y del Órgano
Electoral. Por eso decimos no al revocatorio, sí a la acción directa. Nuestro
objetivo no es derrocar a un Gobierno, sino conseguir que nuestros derechos
sean respetados”, sostuvo.
BASE DE LA
ALIANZA
“Las
luchas sociales que se realizan en el país y en América latina son contra el
capital financiero que penetra estos países para saquear sus recursos
naturales. Por eso, la lucha por el TIPNIS y la defensa de los recursos
naturales va encaminada a preservar la autodeterminación de los pueblos
indígenas. También, en la última época, ha servido esta lucha de los pueblos
indígenas como lucha del conjunto de la nación oprimida. Ante la ausencia de un
movimiento obrero, se presentan los indígenas para -desde su perspectiva- guiar
al movimiento. Pero hay que tener en claro que los indígenas con su propiedad
colectiva, así como los campesinos con la pequeña propiedad, no pueden hacer
una lucha eficaz contra el capitalismo. Hace falta una alianza férrea entre
obreros de este país y campesinos e indígenas: esa es la base fundamental para
esta alianza”, dijo Javier Huarachi, del Comité de apoyo al TIPNIS de
Chuquisaca.
LA MARCHA ES
INDÍGENA
El
presidente de la Subcentral TIPNIS, Fernando Vargas Mosúa, en la Universidad
Mayor de San Andrés, donde se realizó este encuentro. También opinó sobre las
sugerencias de algunos sectores de esgrimir un pliego conjunto de demandas.
“Hay
que entender que la marcha es protagonizada por los pueblos indígenas, es
liderizada por los pueblos indígenas. Otros sectores son de apoyo a la
movilización. Es importante hacer notar que lo que nosotros planteamos no es
únicamente la defensa del TIPNIS, sino la defensa de los recursos naturales, de
la biodiversidad, del medio ambiente, fundamentalmente los derechos de todo el
pueblo boliviano. Entonces ahí hay la coincidencia de una plataforma única.
Cuando
la marcha exige el cumplimiento de la Constitución, exige respeto a los
derechos de todos los bolivianos. Este Gobierno busca desarticular a los
pueblos organizados: es una desarticulación que sepulta todas las conquistas
logradas en los últimos años no solo por los pueblos indígenas, sino por toda
la sociedad”, dijo Vargas.
“Este
no es un Gobierno que busca soluciones, sino que busca más complicaciones en el
país. Y esto no le hace un favor a su política, sino que le hace un daño.
Tenemos conocimiento de que van a entrar 50 soldados al TIPNIS. Así el Gobierno
busca provocarnos. Nosotros recomendamos a las comunidades que no caigan en
esas provocaciones del Gobierno, porque busca victimizarse. En el TIPNIS
tenemos claro que la Consulta (según la ley 222) no se va a realizar”,
manifestó Vargas.
Según
el presidente de la Subcentral TIPNIS, esta Novena Marcha se abortaría
solamente si el Gobierno nacional anulara la ley 222 y optara por respetar la
ley 180 (de protección del TIPNIS), conseguida por los indígenas al finalizar
la Octava Marcha, en octubre de 2011.
Fuente:
CIDOB – www.aininoticias.org